Jornadas de Pranayama

La clase de Pranayama consiste en ciertas asanas específicas para trabajar la apertura del pecho y acondicionar el cuerpo y la mente para el trabajo d ella respiración. La misma se puede realizar tanto acostado boca arriba -en postura de Pranayama- como sentados.

* Una vez por mes, los días sábados por la mañana, se realizan jornadas de Pranayama y se notifica a gravés de e-mail.

LA CIENCIA DE LA RESPIRACIÓN

La importancia de la respiración nasal

La respiración es esencial para la vida. Si bien todos respiramos, muy pocos conservan el hábito de hacerlo natural y con una respiración completa, tal como se puede observar la respiración en un niño sano.

Cuando inspiramos, el aire penetra por la nariz (órgano exclusivamente diseñado para respirar) a través de las ventanas nasales, y es calentado a este nivel por la membrana mucosa denominada pituitaria roja, la cual tapiza éstas cavidades por dentro. A la vez, glándulas secretoras de mucus lo humedecen y retienen las partículas nocivas que pudiera contener, en donde colaboran los pelillos que aparecen en la entrada de las ventanas. Estas partículas son eliminadas en la siguiente espiración.

El diafragma -músculo que separa la cavidad torácica de la cavidad abdominal- colabora activa y en forma sumamente importante, sobre todo en la fase de exhalación, éste músculo que en reposo posee forma abovedada, pasa a la forma casi plana cuando se contrae, con lo que la cavidad torácica aumenta de volumen, posibilitando la entrada de aire a los pulmones. Cuando se relaja, los pulmones se contraen y el aire es expulsado al exterior. Aunque puede aprenderse a actuar de forma voluntaria sobre este músculo, sus mecanismos de regulación son principalmente automáticos.

Desde un punto de vista mas psicológico, soltar el aire por la boca es estar fuera del control de ese mecanismo de regulación y entonces fuera de este nivel de conciencia uno realiza actividades que pueden estar mas allá de sus posibilidades reales, mas allá de su real control y pueden sobrevenir ahí los agotamientos, las angustias, los accidentes …

Toda situación angustiante también está directamente ligada a la respiración, en general son situaciones vividas desde la detención del acto respiratorio y sus consiguientes consecuencias, así como las parálisis producidas por los miedos, generadoras estas de situaciones de tensión. El solo hecho de revivir la situación, contándola desde el control de la respiración, genera un cambio a nivel de la conciencia y por lo tanto una diferencia en la manera de revivir y entender la misma.

Los pulmones están formados por bronquios, a través de los cuales se transporta oxígeno del aire a las venas y arterias. Cuando la sangre sale de los pulmones a través de las arterias tiene un color rojo brillante debido a su alto contenido de oxígeno (25 % aproximadamente). Esta sangre es bombeada por el corazón a través de las arterias y de los capilares, llegando de éste modo a todos los órganos y tejidos a medida que la sangre va aportando el oxígeno y captando los productos de desecho de las células, va cambiando de color y adquiriendo el color azulado típico de las venas. De ésta forma, llega al lado derecho del corazón desde donde sale de nuevo hacia los pulmones, distribuyéndose por los millones de capilares. Cuando el oxígeno inspirado se pone en contacto con ésta sangre venosa que contiene los productos de degradación de las células se produce una reacción por la cual las células toman el oxígeno y liberan dióxido de carbono. Una vez que la sangre se ha purificado, vuelve al lado izquierdo del corazón desde donde se distribuirá de nuevo por todo el organismo.

Cuando la cantidad de aire que entra al pulmón es insuficiente, la sangre no puede oxigenarse es decir, no puede purificarse adecuadamente, y los productos de degradación de las células, que deberían expulsarse de la circulación, van intoxicando lentamente nuestro organismo. Cuando la sangre no recibe suficiente oxígeno se vuelve azulada y los distintos órganos y tejidos se quedan desnutridos y deteriorados. La sangre insuficientemente oxigenada contribuye a los estados de ansiedad, depresión y fatiga, y haciendo que muchas veces una situación estresante sea todavía más difícil de superar.

Unos hábitos correctos de respiración son esenciales para una buena salud física y mental. En Occidente es relativamente reciente el conocimiento de la importancia que tienen unos hábitos respiratorios correctos pero en Oriente y desde hace siglos, los ejercicios de respiración han constituido una parte sumamente importante del desarrollo mental, físico y espiritual del individuo. Cuando Occidente ha intentado alcanzar a los países orientales en el entendimiento y utilización del control de una respiración correcta, ha tomado prestadas muchas de las enseñanzas del Yoga para proporcionar el control del cuerpo y de la mente mediante la auto-disciplina.

En Occidente éstos ejercicios han sido tomados por la actividad física, más precisamente por el deporte, en donde el acento no está puesto en la salud sino en la eficiencia y en la obtención de resultados visibles y demostrables, y no precisamente en término de procesos internos.

Se piensa actualmente que haciendo deportes o técnicas de trabajo aeróbico se solucionan los temas referentes a los sistemas respiratorio, cardio-vascular, y nervioso; pero esto pasaría si se trabajara mucho más conscientemente en el tema de la atención sobre la respiración. El cuerpo no es sólo un cuerpo muscular, capaz de responder a las exigencias con los métodos de repetición, la desconexión entre las exigencias del afuera y los pedidos reales del propio cuerpo llevan a la serie de repetidos accidentes. La actividad física intensa debería tener su compensación en un trabajo con la no-acción, ya sea ligado a la relajación o a la meditación.

Desde la salud podemos hablar de la posibilidad de tener acceso al sistema nervioso vegetativo a través de éste control de la respiración, y a mejorar y solucionar estados de ansiedad, depresión, irritabilidad, tensión muscular y fatiga.