La práctica
Las palabras no pueden convenientemente describir el valor del yoga, éste debe ser experimentado.
B.K.S Iyengar
Las palabras no pueden convenientemente describir el valor del yoga, éste debe ser experimentado.
B.K.S Iyengar
Se puede llegar 15 minutos antes del inicio de la clase para comenzar una alineación mental y una relajación corporal de manera de la persona esté dispuesta física, mental y emocionalmente. Esta primera etapa puede realizarse en posturas como Viparita Karani, Supta Baddhakonasana, Supta Virasana, Urdva Prasarita Padasana o tan solo Savasana.
Luego con la llegada del maestro/a se sientan todos en una posición de Swastikasana (piernas cruzadas) sobre una altura que puede ser un bolster o mantas dobladas y se hace un saludo con manos en posición de Namaskar representado por la Oración a Patañjali.
Luego se practican dos o tres posturas iniciales: Addho Mukha Virasana, Uttanasana y Addho Mukha Svanasana -o la postura del perro que mira hacia abajo-.
A continuación viene el desarrollo de la clase, en la cual se busca la perfección del trabajo con las posturas y para eso se requiere de una acabada y minuciosa técnica.
Una postura hecha en el estilo Iyengar podría medirse con escuadra dada la búsqueda de la perfección en sus líneas y sus ángulos; nada está así como me sale naturalmente, todo está alineado, colocado en su correcto lugar y por lo tanto las fuerzas caen en ese equilibrio. Cuando hay equilibrio hay armonía y bienestar, lo que significa también un intenso e increíble trabajo terapéutico.
Pueden realizarse posturas de pié fundamentalmente en una primera etapa o flexiones hacia adelante, flexiones hacia atrás, torsiones, inversiones, equilibrios. Dos posturas que también forman parte de cada clase son Sirsasana -o el paro de cabeza- y Sarvangasana -o el paro sobre los hombros-.
Para combinar posturas con técnica muchas veces se utilizan los props -tales como ladrillos de madera, sillas, mantas, bolstes –o almohadones cilíndricos-, cinturones, estructuras en las paredes para poder colgarse, etc.-, que permiten a cada uno de los integrantes que lo practican arribar a las posturas de la manera mas ajustada o parecida a la postura ideal, y recibir así los beneficios de las mismas.
Se termina la clase en postura de Savasana -o la postura del muerto-.